Envejecimiento
En esta guía encontrará una serie de ejercicios que permitirán, dependiendo del nivel de capacidad
funcional del anciano (limitación grave, limitación moderada y limitación leve, evaluada
según la puntuación en el SPPB y la velocidad de la marcha), trabajar:
• La fuerza y la potencia, tanto de brazos como de piernas.
• El equilibrio y la marcha, con el fin de evitar las caídas.
• La flexibilidad.
• La resistencia mediante ejercicios de cardiovascular.
Este trabajo realiza un análisis acerca del empoderamiento en la vejez, incluyendo diversos aspectos con los que se relaciona y que lo condicionan ya sea negativa o positivamente en esta etapa de la vida. Se reflexiona en torno a los modos en los que los usos del poder, las representaciones negativas acerca de la vejez y los modelos que se proponen acerca de ella, inciden en la construcción social de la identidad y en el desempoderamiento durante esta etapa de la vida. En este sentido, los estereotipos negativos recaen sobre los adultos mayores, limitándolos y condicionándolos en su modo de ser y de comportarse. Las personas de edad asumen en muchos casos el lugar desvalorizado y marginal que socialmente se les asigna, ya que es lo esperable y considerado normal para la vejez. A continuación se caracteriza al empoderamiento como un proceso que implica la revisión y problematización de ciertos códigos culturales, produciendo cambios de orden ideológico y social. Este proceso posibilita el fortalecimiento del autoconcepto de las personas en él involucradas y la reconstrucción de identidades. Finalmente, se analiza la relación del empoderamiento con la participación comunitaria y el surgimiento de variadas organizaciones y redes sociales de adultos mayores desde las cuales intervienen activamente, toman decisiones, producen transformaciones y se consolidan como grupo de poder.
En un momento de desafíos impredecibles para la salud, una tendencia es cierta: las poblaciones de todo el mundo están envejeciendo rápidamente y esta transición demográfica tendrá un impacto en casi todos los aspectos de la sociedad. La salud es fundamental para nuestra experiencia en la vejez. Sin embargo, mientras vivimos más tiempo, hay poca evidencia que sugiera que estos años adicionales se disfruten en buena salud. Además, una de las características de la vejez es la gran diversidad de salud y funcionamiento. Dado que esto es a menudo una consecuencia de los impactos acumulativos de la ventaja o desventaja en la vida de las personas, las respuestas políticas deben diseñarse de manera que superen, en lugar de reforzar, estas desigualdades.
We are living longer than ever before and the age profile of our society is changing rapidly. The number of people aged 65 and over will increase by more than 40% within 20 years, and the number of households where the oldest person is 85 and over is increasing faster than any other age group. These changes have profound implications for each of us, as well as for government, business and civil society
Los materiales que aquí se presentan son el resultado, no solo del conocimiento de los especialistas en la materia, sino de las aportaciones de cientos de expertos, personas con discapacidad, familiares, profesionales y voluntarios, con los que hemos tenido la suerte de conversar a lo largo de estos años sobre las cosas que ayudan a tener una vida plena y feliz y sobre cómo poder apoyarnos para conseguirla.
Envejecimiento, personas mayores y Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Perspectiva regional y de derechos humanos.
S. Huenchuan (ed.), Envejecimiento, personas mayores y Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible: perspectiva regional y de derechos humanos, Libros de la CEPAL, N° 154 (LC/PUB.2018/24-P), Santiago, Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), 2018.
La presente obra recoge las aportaciones conceptuales, las reflexiones, las propuestas metodológicas y las experiencias de buenas prácticas que nutrieron y dieron sentido al II Congreso Internacional: ‘Trabajo Social. Arte para generar vínculos’, celebrado en el campus de Donostia/San Sebastián de la Universidad de Deusto en octubre de 2016.
El libro está estructurado en dos partes, en la primera se recogen los contenidos de las ponencias invitadas del Congreso, de manera que las y los autores y profesionales referentes en el tema propuesto nos plantean sus reflexiones y conceptualizaciones.
La segunda parte de la obra recoge las comunicaciones presentadas en los siete Momentos de En cuentro. En la misma se refleja la diversidad de perspectivas, experiencias y miradas que conforman y confirman el Trabajo Social entendido como arte para generar vínculos.
The Department of Economic and Social Affairs of the United Nations Secretariat is a vital interface between global policies in the economic, social and environmental spheres and national action. The […]
Las comunidades autogestionadas tipo cohousing o viviendas colaborativas desde hace décadas son definidas como modelo residencial donde existe un equilibrio entre vida privada, comunitaria y compromiso social.
Esta investigación confirma algo que todos percibimos, las nuevas generaciones de personas mayores despliegan comportamientos y demandas sociales muy diferentes a sus antecesores. Rechazan ser categorizadas en virtud de su edad e impugnan el rol clásico del “mayor”. Las estructuras sociales que daban sentido a ese rol en una etapa de la vida se han transformado y, en consecuencia, quienes ahora envejecen denuncian el sinsentido de una consideración con la que no se identifican y que, de hecho, no representan. Reivindican seguir en el mundo desde un lugar en el que se les reconozca más allá de la edad que atesoran, por lo que el reto de la sociedad en estos momentos estriba en la capacidad de generar plataformas que den respuesta a esa búsqueda de reconocimiento a través de un desarrollo personal compartido en la participación social. Qué roles están dispuestas a desempeñar estas personas, qué factores inciden en el proceso de renovación del significado de este momento de la vida y por qué sucede ahora y a través de estas generaciones son, por lo tanto, las preguntas que ordenan la presente investigación.
La familia, en particular la mujer, es la que tradicionLa baja natalidad, la baja mortalidad, la elevada expectativa de vida y el consecuente predominio de las enfermedades crónicas y del grupo de personas mayores son las principales características actuales y futuras de nuestra sociedad, epidemiológica y demográficamente hablando. Estos factores conllevan un incremento imparable en el número de personas dependientes que requieren cuidados de larga duración y de las necesidades de asistencia desde los sistemas formal e informal.
La familia, en particular la mujer, es la que tradicionalmente ha asumido la atención a las personas dependientes en el domicilio, dado el carácter sociológicamente familista de las sociedades mediterráneas (Esping – Andersen, 1999). Por un lado, esta situación es insostenible en la actualidad por la fuerte discriminación de género que implica y porque la responsabilidad de los cuidados descansa sobre un grupo de la población cuya disponibilidad es finita, dado el cambio cultural y laboral hacia la igualdad de género en nuestro país (Garcés, Ródenas y Sanjosé, 2003; Gorri et al., 2003).
Todo ello, influye negativamente sobre la calidad de vida y el bienestar psicológico de las personas dependientes, a la vez que también sobre sus cuidadores principales. Es por todo ello, que la carga de los cuidadores informales se ha conformado hoy como un problema sanitario y social que requiere un profundo estudio, a la vez que soluciones adecuadas por medio de programas de apoyo e intervención desde la Psicología, entre otras ciencias. almente ha asumido la atención a las personas dependientes en el domicilio, dado el carácter sociológicamente familista de las sociedades mediterráneas (Esping – Andersen, 1999). Por un lado, esta situación es insostenible en la actualidad por la fuerte discriminación de género que implica y porque la responsabilidad de los cuidados descansa sobre un grupo de la población cuya disponibilidad es finita, dado el cambio cultural y laboral hacia la igualdad de género en nuestro país (Garcés, Ródenas y Sanjosé, 2003; Gorri et al., 2003).